Principios básicos para criar periquitos con total garantía

La tarea de criar periquitos no debería contar con ningún obstáculo siempre y cuando se cumpla una serie de requisitos indispensables que faciliten este proceso con total garantía.

En este post, queremos ayudarte en el cometido de criar periquitos, ya que es una especie muy demandada y los criadores pueden contribuir a extender el árbol genealógico de sus mascotas durante la época de celo con algunos trucos muy sencillos.

Los mejores consejos para criar periquitos correctamente

Aunque parezca sencillo, el hecho de criar periquitos en el ámbito doméstico requiere una serie de atenciones y cuidados que ayudarán a mejorar los resultados, anteponiendo el bienestar de todos los ejemplares, tanto los progenitores como sus descendientes.

Vamos a centrarnos en algunos puntos concretos para optimizar tus esfuerzos de cara a una cría de periquitos segura y productiva.

Edad

Una de las grandes cuestiones a la que debes atender, sin lugar a dudas, es la edad de los periquitos: en este sentido, tus ejemplares no pueden tener menos de un año de edad ni más de cuatro.

Esta es una recomendación que, entre los expertos, varía según el criterio, pero se ha llegado a un punto intermedio, que es esta horquilla de edad, por haberse demostrado los mejores resultados.

Evidentemente, necesitas contar con una pareja de periquitos de diferente género para que acaben reproduciéndose correctamente.

Actitud y cercanía entre ambos

Esta es, probablemente, la cuestión más importante y, a la vez, delicada de cuantas se deben tener en cuenta, ya que, si no existe sintonía y buena relación entre los dos ejemplares, es posible que no se cumpla con los requisitos indispensables para la cría de periquitos.

Te recomendamos que les dejes cierto margen de aclimatación una vez les juntes porque, de este modo, se adaptarán a la vida en compañía en el interior de la jaula.

Que duerman juntos, que se alimenten el uno al otro y que se limpien entre ellos son señales inequívocas de que ha surgido un nexo muy estrecho entre ellos y que, por tanto, parece que todo va según lo previsto.

La jaula juega un papel importante

Otro de los elementos clave es la jaula, el lugar en cuyo interior permanecen los periquitos en cautividad.

La jaula de pájaros de esta variedad debe ser amplia, en busca de un espacio en el que no se sientan estresados por la falta de espacio. Por ello, no escatimes en la adquisición de esta estructura.

Cuando se acerca la época de reproducción de los periquitos, tienes que hacer hueco para la llegada de los nuevos animales, adaptando así la jaula ante este nuevo escenario.

Recuerda que debes priorizar la amplitud de las jaulas a lo ancho, ya que los periquitos son aves que suelen volar en horizontal.

La limpieza es otro recurso muy importante para conseguir criar periquitos con los mejores resultados, ya que los ejemplares junior son mucho más vulnerables que los adultos y, una vez eclosionan de los huevos, necesitan que se elimine cualquier resto de suciedad que pudiese ser un riesgo para ellos.

Retira también cualquier juguete de cuerda que pueda haber en el interior de la jaula, ya que podría suponer un peligro por posibles enredos.

El nido

Si quieres hacerte con nidos para pájaros de este tipo, sería el mejor sustituto de las pequeñas estructuras que ellos, de manera autónoma, pueden construir para acoger a sus pequeñas crías.

Con todo lo que tienen que hacer para optimizar el proceso de reproducción, no les viene mal un poco de ayuda.

Eso sí, busca el mejor sitio para colocarlo y así evitar cualquier problema en las crías; una de las soluciones, en este sentido, es colgarlo en la parte alta de la jaula para así no hacerles pensar que un posible devorador, que se suele mover por abajo, puede acabar con su vida.

Alimentación

La alimentación de pájaros periquitos es otro punto interesante para mejorar los resultados de la reproducción: tener a las hembras perfectamente mantenidas es importante, con el suministro de complementos junto a su dieta habitual para mejorar la reproducción de esta especie, que conste de verduras y frutas frescas.

También puedes optar por un aporte adicional de calcio disuelto en el agua para garantizar la mejor anatomía posible de las crías y, por consiguiente, su bienestar, asegurando así una gran firmeza de los huevos resultantes.

Por supuesto, tienes que procurar en todo momento que dispongan de agua fresca y limpia para estar perfectamente hidratadas.

El apareamiento, la puesta de huevos y el nacimiento

Una vez el macho haya realizado el cortejo varias veces, la hembra experimentará una contracción de las pupilas y se colocará en forma de V, disponiendo así su cuerpo para el momento de la cópula.

Unos 9 días después, pone el primer huevo, depositando en días alternos los siguientes, siendo, generalmente, entre 4 y 8 las unidades que se suele poner en cada puesta.

Transcurridos unos 16-20 días, las crías de periquito eclosionarán sin plumas y sin poder abrir aún los ojos. No te alarmes al verles así, ya que hasta pasada una semana no comenzarán a intentar abrirlos y a sacar el plumón que les cubrirá.

La primera semana, las crías se alimentarán a base de la leche materna, que es una sustancia que segregan las madres y que no puedes reemplazar por ningún otro producto, ya que consta de recursos nutricionales importantes para su desarrollo.

El momento de salir del nido se dará pasado un mes, para el que tendrás que estar atento, ya que existe cierto riesgo de que los padres dañen a los polluelos; por eso, es clave que uses separadores para mantener cierta distancia pero que ello no suponga un impedimento para seguir alimentándoles.

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