Tomado de El Economista.es
Fotografía del ritual. Imagen: Reuters
Decenas de miles de personas han acudido a la ceremonia que se celebra cada cinco años en el templo Gandhimai, cerca de la frontera con India. Unos 500.000 animales son sacrificados durante el evento, según ha estimado el grupo Humane Society International.
Enfrentamientos
Las autoridades del país han tenido que desplegar cientos de efectivos para asegurarse de que no se producían enfrentamientos entre los activistas y los devotos.
Más del 80% de los 27 millones de habitantes de Nepal son hindúes, a diferencia de la mayoría de sus homólogos en la vecina India, con frecuencia sacrifican animales para honrar a las deidades durante los festivales.
"Se trata de un ritual relacionado con la fe de la gente", ha justificado Yogendra Dulal, un administrador adjunto del distrito de Bara, donde se encuentra el templo. "No podemos herir sus sentimientos y prohibir la práctica", ha añadido.
"No está bien matar a animales en nombre de la religión", ha criticado Uttam Kafle, activista por los derechos de los animales en Nepal. "Estamos tratando de convencer a la gente de que pueden adorar pacíficamente y sin ser crueles con los animales", ha añadido.
Ritual religioso
En el ritual, que arranca de madrugada, se sacrifica primero a cinco animales simbólicos: una rata, una cabra, un gallo, un cerdo y una paloma. Después, unos 5.000 búfalos son decapitados por los carniceros utilizando espadas y cuchillos.
También se mata a miles de cabras y pollos desde este viernes hasta el sábado, cuando se pone cierre a la celebración, según han explicado los oficiales del templo.
Después, las cabezas de los animales serán enterradas en un pozo, mientras que las patas y las pieles se venderán entre los comerciantes.
El Tribunal Supremo de India ha pedido recientemente al Gobierno que trabaje para detener el movimiento y contrabando ilegal de animales en Nepal para la ceremonia.