El rescate fue posible gracias a un grupo de trabajadores de la ciudad, y una embarcación especialmente diseñada, que resultó ser perfecta para salvar al felino.
No se sabe cómo el gato terminó tan lejos de la costa, lo más probable es que no hubiera durado mucho más tiempo de no ser por esas buenas personas que lo vieron a tiempo y rescataron usando una banda transportadora que normalmente se utiliza para recoger los desechos flotantes del océano.
Aunque tal vez nunca se sepa cómo llegó el felino al mar, lo importante es que sobrevivió. El gato está en buen estado de salud y regresó con éxito a tierra firme.