Tortugas de agua: cuidados, comportamiento y características

Las tortugas de agua son uno de los reptiles más extendidos en el ámbito doméstico, por lo que es conveniente tener presente una serie de sugerencias, recomendaciones, trucos y consejos para el cuidado de esta especie.

En este post, te ofrecemos la mejor información para que puedas tener una tortuga de agua en perfectas condiciones y puedas disfrutar de la compañía de estos reptiles tan valorados.

Características de las tortugas de agua 

Conocidas también por el nombre científico Graptemys sp o Pseudemys sp, se trata de una mascota acertada si buscas un animal con cuidados relativamente sencillos.

Con una esperanza de vida de entre 10 y 20 años, suelen tener un tamaño que oscila entre los 10 y los 40 cm en su caparazón.

Comportamiento

Cabe destacar que, entre las razones por las que son tan apreciadas en el sector, está que son seres muy pacíficos y afables. Por lo general, no muerden, a no ser que te hagas con variedades más exóticas y huidizas.

Eso sí, son animales a los que no les gusta que se les manipule, más allá de lo estrictamente necesario, pero sí les gusta ser observados.

Cuidados de las tortugas de agua

Si quieres conocer cuáles son los mejores cuidados de las tortugas de agua, debes tener presente en todo momento que se trata de un animal de sangre fría, por lo que, para asegurar su máximo bienestar, debes regular su temperatura corporal como si se encontraran en su hábitat natural, el cual se encuentra, generalmente, en el sureste de Estados Unidos y el noreste de México.

A la hora de valorar el lugar en el que colocar el recipiente en el que se quedarán estos animales, debes procurar un lugar tranquilo y alejado de puertas y ventanas, evitando así las corrientes que podrían lastrar su estado de salud. Tampoco es positivo para el mantenimiento de esta especie que se le sitúe cerca de radiadores.

La tortuguera debe ser espaciosa y grande, con capacidad para que el animal se pueda mover con cierta capacidad en su interior.

Un depósito de entre 8 y 15 litros sería suficiente para un ejemplar joven, con un caparazón de entre 3 y 6 cm. Conforme vaya creciendo y desarrollándose, requerirá un mayor espacio para su movimiento.

Eso sí, si dispones de un jardín y un amplio espacio al aire libre, debes priorizar colocarle en un estanque, con un área seca donde descansar y un poco de agua donde poder nadar y desenvolverse con normalidad.

Si este no es tu caso, no significa que no puedes mantener en óptimas condiciones una tortuga acuática, haciéndote con una tortuguera con suficiente espacio para este animal.

En cuanto a su profundidad, un truco para que aciertes es que le pongas en vertical y llenes el recipiente del doble de lo que le cubre en esa posición. De esta forma, el animal podrá nadar con cierta libertad en su tortuguera.

Este recipiente debe tener una parte seca en la que, además de descansar, logrará regular su temperatura corporal. Si no cuenta con una superficie para salir a flote, la tortuga puede sufrir un excesivo desgaste de energía, estrés e, incluso, posibles enfermedades en el caparazón.

Accesorios idóneos para el cuidado de las tortugas de agua

Las tortugas de agua necesitan algunos complementos indispensables para un cuidado integral, entre los que se encuentran los relativos a la humedad, la temperatura y la luz:

Dispositivo de filtración: se encarga de mantener el agua totalmente limpia y libre de suciedad, equilibrada desde el punto de vista biológico, lo que se traduce en una significativa mejora de la calidad de vida de las tortugas acuáticas.

Termocalentador: se trata de un equipo específico que se ocupa de mantener el agua en una temperatura que oscila entre los 23 y los 25 grados.

Iluminación: si tienes a tu pequeña mascota en el interior del inmueble, sin posibilidad de que reciba los rayos del sol, lo mejor que puedes hacer es comprar un sistema de iluminación que consta de un portalámparas y una bombilla especial para estos animales, la cual consigue un equilibrio entre la luz UVA y UVB que es vital para su metabolismo de vitaminas y calcio. Estos dispositivos cuentan con la protección suficiente ante posibles salpicaduras de agua.

Una de las peculiaridades de esta especie es que no suele hacer uso de los juguetes que puedes ofrecerle pero sí agradecerá cualquier artículo que le permita una moderada escalada, así como una serie de arbustos, ramas y pequeñas piedras que hagan muy realista su entorno.

Además, como son animales excavadores por naturaleza, puedes introducir una solución de arena y gravilla en el agua para que se entretengan ejercitando estas dotes.

Limpieza de la tortuguera

Es fundamental que, si tienes pensado adoptar una tortuga de agua, mantengas una rutina de limpieza porque es muy importante para la salud de esta especie: en el caso de tortugueras pequeñas, de menos de 15 litros, tienes que cambiar el agua entera dos veces a la semana; si el contenido es superior, basta con hacerlo una vez por semana.

Esta necesidad se hace más imperiosa si no se dispone de un sistema de filtración. Además, es conveniente que recurras a un acondicionador para el agua para evitar el estrés y que limpies con agua corriente todos los elementos que rodean al animal.

Un apunte muy importante en este sentido es que te laves bien las manos tras limpiar el acomodo de las tortugas acuáticas, evitando así posibles problemas sanitarios.

Alimentación de las tortugas de agua

Puedes ofrecerle sticks o pellets con un contenido específico para estos animales, siempre que la fórmula esté totalmente ajustada a la edad de tu mascota.

Ten en cuenta que las tortugas son ejemplares omnívoros y les encanta comer, por lo que es buena idea optar por una dieta variada pero equilibrada.

Lo mejor para ellas es que le suministres los alimentos, al menos, dos veces al día. Tiene que comerse todo en menos de 3-4 minutos, siendo necesario que retires los restos de su entorno.

Puedes alternar su principal alimentación con otras soluciones, como Gammarus, larva de mosquito y Krill.