El bienestar de nuestras mascotas es una preocupación constante para muchos adoptantes responsables. Sin embargo, hay una amenaza invisible que acecha en el suelo y puede poner en peligro tanto la salud de nuestras queridas mascotas como la nuestra propia: Toxocara canis.
Este parásito, también conocido como lombriz del perro, es más común de lo que imaginamos y es importante entender sus riesgos y cómo prevenir su propagación.
En este artículo, exploraremos en detalle qué es Toxocara canis, cómo se transmite, los síntomas asociados, los riesgos para la salud y las medidas preventivas que debemos tomar.
¿Qué es Toxocara canis?
Toxocara canis es un parásito intestinal que afecta principalmente a los perros, aunque también puede infectar a otros animales, incluidos los humanos.En este sentido, estaríamos hablando de una zoonosis.
Pertenece a la familia de los nematodos, un grupo de gusanos redondos que pueden vivir en el intestino de los hospedadores infectados.
Estos parásitos se alimentan de los nutrientes en el intestino y pueden causar daños significativos a la salud del hospedador si no se tratan adecuadamente.
Transmisión y ciclo de vida
La principal vía de transmisión de Toxocara canis es a través de las heces de los perros infectados.Los huevos del parásito son eliminados en las heces y pueden permanecer viables en el suelo durante meses e incluso años.
Si una persona o un animal entra en contacto con suelo contaminado con huevos de Toxocara, existe el riesgo de ingesta accidental de los huevos.
Una vez ingeridos, los huevos eclosionan en el intestino delgado y las larvas migran a través de los tejidos y órganos del cuerpo, causando daño y provocando una serie de síntomas.
En los perros, las larvas pueden volver al intestino, donde se desarrollan hasta convertirse en adultos y continúan el ciclo de infección.
En los seres humanos, las larvas migratorias pueden causar problemas graves en varios órganos, incluidos los pulmones, el hígado y los ojos.
Síntomas y riesgos para la salud
En los perros, los síntomas de una infección por Toxocara canis pueden variar y pueden incluir vómitos, diarrea, pérdida de peso, debilidad, apetito disminuido y, en casos graves, una apariencia de barriga hinchada debido a la acumulación de gusanos adultos en el intestino.Los cachorros pueden presentar un crecimiento deficiente y problemas de desarrollo si están infectados.
En los seres humanos, los síntomas pueden ser más variados y dependerán de los órganos afectados por las larvas migratorias.
Algunos de los síntomas más comunes incluyen fiebre, dolor muscular, tos persistente, dificultad para respirar, ictericia y problemas oculares.
En casos raros, las larvas pueden migrar al cerebro y causar daño neurológico grave.
La prevención es fundamental.
La mejor manera de proteger a nuestras mascotas y a nosotros mismos contra Toxocara canis es tomar medidas preventivas adecuadas.
Algunas pautas importantes que debes seguir son:
Desparasitación regular: Es fundamental desparasitar a nuestras mascotas siguiendo el programa recomendado por el veterinario. Los productos antiparasitarios eficaces pueden prevenir la infección o eliminar los parásitos existentes.
Recolección adecuada de heces: Siempre debemos recoger y desechar adecuadamente las heces de nuestras mascotas. Esto evita la contaminación del suelo y reduce el riesgo de propagación de los huevos de Toxocara.
Higiene personal: Después de estar en contacto con perros o áreas donde hay perros, es esencial lavarse las manos adecuadamente con agua y jabón. Esto ayuda a prevenir la ingestión accidental de huevos de Toxocara.
Evitar el contacto con suelos contaminados: Siempre debemos evitar que nuestras mascotas jueguen en áreas que puedan estar contaminadas con heces de perros infectados.
Educación y concienciación: Es importante difundir información sobre Toxocara canis y sus riesgos para que otros adoptantes de mascotas puedan tomar las medidas adecuadas de prevención y cuidado.
Conclusión
Toxocara canis es un parásito común que puede causar daños significativos a la salud de nuestras mascotas y la nuestra propia.La prevención y la educación son fundamentales para combatir esta amenaza silenciosa.
Al desparasitar regularmente a nuestras mascotas, recolectar adecuadamente las heces y mantener una buena higiene personal, podemos reducir el riesgo de infección y garantizar un entorno saludable para todos.
Recuerda, la protección de nuestras mascotas y nuestra salud depende de nuestras acciones responsables.
Sandra Ferrer. Creadora del Programa de Educación Canino “Cómo Educar a un Cachorro”