Pero en el lado opuesto están otro tipo de mascotas como son los peces, mascotas que te invitan a todo lo contrario: a relajarte, a contemplar cómo con sus suaves movimientos se desplazan por el agua, y mientras los observas desde el otro lado del cristal, te invade una sorprendente calma que hace que te olvides de tu estresante día.
Lo más positivo de la convivencia entre perros y peces es que ¡se llevan de lujo! A los perros normalmente no les atraen los peces, como sí pasa con los gatos, por tanto, hoy queremos hablaros de los peces de acuario marino, todo un lujo al alcance de los amantes de los animales acuáticos.
Los acuarios marinos son acuarios de agua salada. Se diferencian de los acuarios de agua dulce, salvando la evidente que es la salinidad del agua, por los vivos y sorprendentes colores de su fauna y flora. Plantas exóticas que te transportan automáticamente a otro mundo. Animales marinos que no solo quedan en peces: erizos, estrellas, anémonas o corales son otras especies marinas que puedes disfrutar en tu acuario marino.
Un acuario marino, si bien no es difícil de mantener, sí requiere de tu tiempo. No olvidemos nunca que son animales que necesitan ser cuidados (debemos ofrecerles el ambiente perfecto en luz y temperatura que requieren), alimentados, limpiados y, en definitiva, mantenidos en perfectas condiciones para que puedan nadar y vivir plácida y felizmente.
Hay quienes tienen acuarios marinos solo de flora, lo cual les hace tener otro tipo de cuidados.
Sea como fuere, los acuarios marinos son todo un disfrute para la vista, tanto para ti, como para tu perro, y si no, mira este maravilloso ejemplo que invita al relax.