La joven Chien amaba a los animales y quería dedicar su vida a ellos, sin embargo, la cruda realidad la golpeó fuerte.
Taiwán, un país con un elevado número de animales callejeros Taiwán cuenta con una elevadísima población de animales callejeros. En los años 90 más de 600.000 perros y gatos abandonados poblaban la isla, y aunque ese número se ha reducido notablemente en los últimos años, las medidas al respecto siguen siendo un caso de conflicto político.
Los animales acogidos en refugios son sacrificados tras un corto periodo de 2 semanas si no se encuentra un hogar para ellos.Además se han conocido casos en el país de refugios que ahogaban a los animales, los enterraban vivos o incluso los mataban de hambre por la falta de recursos y la saturación de los centros.
Ante esta brutal situación, reaccionó la joven veterinaria de 32 años de forma drástica.
Chien Chih-cheng, se quitó la vida porque no podía soportar matar a más animales
En varias entrevistas la veterinaria afirmó sentirse desolada por la situación a la que se enfrentaba a diario. Tras su primer día de trabajo en el refugio reconoció haber pasado la noche llorando.
Chien, que esperaba ayudar a los animales se encontró con un trabajo muy diferente. En su centro de trabajo, reconoció haber sacrificado hasta 60 animales diarios ( unos 700 perros en el total de su carrera). Para poder seguir con su día a día la veterinaria se decía a sí misma que de esta manera les evitaba un mayor sufrimiento.
Las enfermedades, las plagas y la vida dentro de jaulas en refugios de Taiwán no era una alternativa que ella considerara buena para los animales, así que seguía haciendo su trabajo.
Chien, denunció la situación en un medio de televisión local, contando detalles como que antes de practicar la eutanasia a los perros, se marchaba a darles un paseo y conversaba con...
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