Al igual que dan mucho cariño, también necesitan en todo momento que sus dueños les hagan caso y es muy importantes que se sientan amados, para que con el paso del tiempo no se conviertan en perros frustrados.
Las personas que quieren tener este tipo de perros cuentan con la gran ventaja de que siempre tendrán amor y lealtad de su parte, pero también van a requerir a sus dueños lo mismo.
Si quieres pasar tiempo con un Braco de Weimar, la mejor forma de hacerlo es por medio de los retos y los juegos en los que el perro tenga que pensar. Eso ejercitará su inteligencia y hará que el vínculo entre el perro y su dueño se haga mucho más fuerte.
Además de ejercitar la mente, este tipo de perros también requiere que se le ejercite físicamente, por lo que son perfectos para las personas que salen a correr cada amañan o hacen algún tipo de deporte al aire libre.
Los Braco de Weimar requieren de una educación cariñosa pero estricta, sino podrían llegar a confundir los roles y creer que son ellos los dueños de la manada, lo que les haría tener una personalidad un poco más agresiva e incluso arisca cuando las personas nos visiten en casa.
Si vives en una gran ciudad o en una pequeña granja, no vas a tener problemas, ya que este perro se adapta a cualquier tipo de vivienda. Sin embargo, en ambos casos el perro debe contar con ejercicio diario.
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