Artículo de María Lillo, tomado de El País.com
Cría de ciervo-ratón en Bioparc Fuengirola.Solo hay 43 ciervos-ratón en Europa. Y en Fuengirola se encuentra, desde hace una semana, el más pequeño de los rumiantes más pequeños del mundo. La especie Tragulus javanicus es originaria del sudeste asiático, donde ocupa un lugar preeminente en sus cuentos tradicionales por la gran inteligencia que se les otorga a estos animales.
"El ciervo ratón es un animal rodeado de mucho misterio", cuenta Asun Portillo, de Bioparc Fuengirola. "Su reducido tamaño y sus hábitos nocturnos hacen más difícil que se conozca con seguridad cuántos individuos quedan en libertad". La madre de este cérvido nació en Bioparc, el único parque que cría a esta especie en España, en 2007. Y su padre llegó del zoo de Lille hace un año. Ambos se encuentran dentro de un programa coordinado de reproducción de esta especie en Europa.
Los ciervos-ratón son herbívoros primitivos, que existen desde hace 30 millones de años. Habitan en bosques lluviosos y manglares, nunca lejos del agua, de la isla de Java, en Indonesia. Su pequeño tamaño, les convierte en la presa perfecta para numerosos mamíferos, aves y serpientes. Algunos nativos del archipiélago indonesio lo consideran también un manjar.
Madre y cría de ciervo-ratón en Bioparc Fuengirola.La cría del parque de Fuengirola "aún no tiene nombre porque no está claro su sexo", informa Portillo. Convive con sus progenitores en una zona denominada La Selva Escondida. Un ambiente que recrea un bosque secundario ?alterado por la acción del hombre? entre las ruinas de un templo en mitad de la selva asiática, y habitado por un centenar de aves, reptiles, anfibios y pequeños mamíferos. Su tamaño "no supera el de un hámster", según Portillo y pesa unos 100 gramos. Nacen completamente formados y se ponen en pie a la media hora. Sus grandes ojos y pequeña nariz le dan cierto aspecto de roedor, de ahí su nombre.
La especie Tragulus javanicus no está considerada en peligro de extinción, todavía, pero la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza estima que están amenazados. La tala masiva de las selvas del sudeste asiático y su sustitución por plantaciones de palmera aceitera amenazan su futuro.