Existe una historia curiosa que nos relata cómo estos gatos vivían con un grupo de monjes, de los cuales tomaron su nombre, los monjes Cartujos de Francia. Hay un mito que nos dice que esta raza heredó de los monjes una peculiaridad: el silencio. Es sabido que así como hay ordenes religiosas que adoptan un voto como puede ser el de la pobreza o el servicio al prójimo, los Cartujos adoptaron el voto del silencio. De ahí se desprende la creencia de que por imitación a esto se debe que los gatos Cartujos casi nunca maúllan y cuando lo llegan a hacer emiten una vocalización muy débil, casi imperceptible que sorprendentemente no concuerda con su estructura y apariencia robustas.
Sin embargo, investigaciones recientes indican que por su aspecto lanoso, pudieron haber recibido este nombre como el tipo especial de lana española manufacturada a inicios del siglo XVIII. Independientemente de cuál sea la verdadera causa de su nombre, lo que es cierto es que hay evidencias de esta raza en documentos del siglo XVI y esto se sabe debido a su textura única y color de pelaje. Cualquiera que sea la razón, el gato Cartujo adquirió toda su vitalidad e inteligencia en Francia,
El pelaje lanoso y de doble capa, suave y lustroso como la gamuza, especialmente grueso en los machos adultos, parece añadir cuerpo a esta raza, sin olvidar que hay un gato corpulento bajo ese pelaje de apariencia platinada.
Estos mininos se convierten en excelentes mascotas una vez que han sido castrados los machos y esterilizado las hembras. Aprenden rápidamente su nombre y gustan de acudir al llamado de sus humanos. Por su naturaleza y temperamento, no es sorprendente que muchos aficionados a los perros los busquen como una de las primeras opciones cuando quieren experimentar el tener a su primer gato.
Los gatitos Cartujos son encantadores. Su madurez física puede llegar incluso hasta el tercer año de vida. Mientras tanto, se recomienda mucha interacción con sus humanos. El medio ambiente y los cuidados que se le dediquen tienen mucho que ver con el carácter y temperamento que tendrán de adultos.