Es una emoción humana pero también canina, por eso, vamos a listarte las fobias más comunes en perros.
¿Por qué se crea una fobia en el perro?
Las fobias se desarrollan a partir de experiencias traumáticas, y son fruto de una falta de socialización con el entorno, sobre todo cuando el perro tiene entre 2 y 4 meses que es cuando se lleva a cabo el periodo de sensibilidad social, falta de exposición a estímulos, pero también son fruto de malas experiencias pasadas o incluso de la genética.
Las 10 fobias más comunes en perros
Tormentas eléctricas
Es la fobia más común y responde al hecho de no saber qué sucede ni por qué sucede y qué consecuencias puede tener.
Si a ello le sumamos que nuestros perros tienen el oído tres veces más sensible que el nuestro, pueden percibir sonidos que nosotros no percibimos y los que nosotros percibimos los oyen mucho más intensos.
Esta fobia que lleva a muchos perros a escaparse de casa, a esconderse en lugares donde se sienten protegidos o a gemir y buscar desesperadamente huir de estos sonidos se puede tratar.
Aquí se explica cómo tratar el miedo a las tormentas.
Petardos y fuegos artificiales
La fobia es la misma que en el caso de las tormentas.
Los fuertes y diferentes sonidos hacen que haya perros que literalmente mueran de infarto, por eso cada vez hay más iniciativas de fuegos artificiales sin sonido.
Es un problema que no solo afecta a animales si no que afecta también a personas con alguna discapacidad que no saben procesar la causa de este estallido, como son algunas personas autistas.
Aquí se explica cómo reducir el miedo a la pirotecnia.
Ir en coche
Hay perros que adoran ir en coche y otros que sufren tal ansiedad que se marean y tienden a vomitar.
Eso sucede sobre todo en perros que apenas van en coche o perros que solo van en coche para ir al veterinario.
Aquí se explica cómo ayudar a un perro a ir en coche.
El veterinario
No es de extrañar que la visita al veterinario pueda convertirse en fobia y es que normalmente las experiencias allí son de todo menos agradables.
El veterinario puede ayudar a que esta fobia desaparezca con el uso de golosinas y elogios tras cada consulta.
Aún así, es importante que por tu parte hagas todo lo posible para que tu perro pierda el miedo de ir al veterinario.
Las escaleras
¿Cuántos perros hay que ante unas escaleras se niegan a bajar o a subir?
El miedo a las escaleras normalmente es fruto de una mala experiencia, pero también puede ser fruto de que el perro no haya sido estimulado cuando era pequeño a bajarlas y subirlas o porque tenga problemas musculares u óseos que no le empujen a usarlas.
Sea cual sea la causa, con paciencia y refuerzo positivo puedes conseguir que tu perro pierda el miedo a las escaleras.
Ahora bien, si es por un tema de salud y tu perro sufre dolor en sus articulaciones y de ahí se niegue a usarlas porque él ya ha asociado que las escaleras suponen dolor, ayúdale cargando con él ese tramo o haciéndote con un arnés de carga.
A quedarse solo
No debemos confundirlo con ansiedad por separación.
Normalmente lo sufren perros que han sufrido un trauma como la pérdida de un ser querido, el abandono, una mudanza o un cambio drástico en sus vidas.
Tratar este problema como un problema de ansiedad por separación puede servir para reducir su fobia, aunque se necesitará de mayor tiempo y paciencia para superarla.
A personas
Son perros que no han sido socializados entre los 2 y 4 meses con personas o bien han tenido una experiencia traumática con ciertas personas y tienen a la generalización.
Por ejemplo, si ha sido un perro maltratato por un hombre obeso, puede que el perro desarrolle miedo a los hombres obesos.
O si han sido tratados como un juguete por niños, tengan fobia a todos los niños.
Para reducir esta fobia hay que tener paciencia, constancia y tiempo para enfrentar de nuevo al perro a el perfil de personas que teme de forma que estas sean todo lo contrario: amables, cariñosas, que le den golosinas… de forma que eses estímulo negativo se convierta en positivo en el tiempo.
A otros perros
Sucede lo mismo como en el caso anterior.
Nada como volver a enfrentar a ese perro a sus miedos de forma positiva y con sumo cuidado.
Al baño
Si tu perro ha tenido malas experiencias con el agua es normal que tenga fobia al baño.
También puede que tenga miedo al secador.
De una forma u otra hay que saber identificar qué es lo que desarrolla esa fobia en el perro y trabajar para que lo que desencadene ese miedo sea algo agradable.
Como siempre, el uso de golosinas siempre es un reforzador positivo.
A objetos desconocidos
La socialización entre los 2 y los 4 meses es tan importante que puede, a lo largo de la vida del perro, ahorrar muchas fobias.
Un perro que a esa edad no ha estado en contacto con otros objetos, ruidos y cosas es más probable que tema a lo desconocido.
Apostar por la exposición a esos objetos de forma calmada y con refuerzo positivo es la mejor terapia para resolver los miedos.
Las fobias en perros
Las fobias en perros deben ser tratadas en el menos tiempo posible para asegurar a nuestro perro una mejor calidad de vida.
Un perro con fobia puede ser destructivo e incluso agresivo, fruto de la angustia y ansiedad que padece.
Si no te ves capaz de ayudarle a superar su fobia o fobias, no dudes en consultar a un especialista en etología.
Este profesional te enseñará a ti y ayudará a tu perro a superar la fobia que sufra.