Juguete Kong
Tanto Adri como yo trabajamos y por lo tanto nos ausentamos de casa unas horas, realmente no son muchas (exactamente entre 3 y 4) pero a Caballero todavía le cuesta. Todavía no entiende que esta es su casa y que vamos a volver, por lo que a veces llora un poco y se queda esperándonos en la puerta. Es bastante doloroso volver de trabajar y verlo sentado frente a la puerta, pero lo cierto es que ya hace una semana que no lo hace!
Cuando estamos en casa está feliz y tranquilo. Le encanta el sofá (aunque esto no es nada nuevo) y su juguete Kong.
Para aquellos que no lo conozcan el Kong es un juguete para perros
que los mantiene entretenidos y estimula la mente (aunque la de mi perro no mucho, porque a lo que inteligencia se refiere no va sobrado). El juguete es una especie de cono de goma muy resistente con
un orificio que se va estrechando en el centro. Dentro de ese orificio se introduce comida y el perro debe intentar sacarla. Caballero se puede pasar un rato bien largo intentando sacar la comida por lo que antes de irme a trabajar se lo lleno de comida y se lo doy.
Caballero y yo en el parque después de jugar con el Kong
Los hay de diferentes tamaños y durezas en función de las características del perro y su precio está entre los 6 y 12 euros.
Pero lo que aquí de verdad cuenta es la opinión del perro, por lo que os dejo un vídeo con la valoración de Caballero.
Caballero en el sofá después de su paseo por el parque