Sacha, perdida de su hogar durante un año
Por Elsie Carbó
grillosazules@gmail.com
Esta es una historia inusual, que solo ocurre pocas veces en la vida, un caso entre 100 pudiera decir, pero que nos hace reflexionar sobre la existencia o no de los milagros, entendiendo por milagros hechos reales y humanos que son de los que voy a hablar. Recuerdan aquella perrita salchicha atropellada en la Avenida Boyeros y San Pedro,? Pues luego de casi más de un año perdida de su casa y otros tres meses de lucha para salvarla se ha reencontrado con su familia. Qué les parece?
Así de sencillo, tal como si fuese un cuento de fantasía, pero no es, porque estoy segura que sin las redes sociales, en este caso Facebook, nunca esta historia hubiese ocurrido.
Ella se perdió de su hogar en el Vedado donde vivió por más de trece años con una familia. Su dueño Gilberto me dice que sospecha que fue robada para usarla como madre paridora en esos bajos y turbios negocios que se han instalado en nuestra sociedad, pero tal vez al ver su edad avanzada fue tirada a la calle como suele suceder en la infamia y el desamor. Si vagó sola durante todo este tiempo en que su familia la buscaba no se sabe. No lo sabremos nunca, pero en su piel y en su cuerpo lleva las marcas del hambre la tristeza y la soledad.
La encontraron atropellado unos jóvenes de la Facultad de Comunicaciones y me la trajeron hasta mi casa para que yo la curara, estaba aterrorizada y con fracturas desconocidas. En mi casa recibió cuidados y tratamientos médicos, hasta que la puse en Facebook y una vecina de Gilberto la vio y dijo: Esa es Sacha, con su nombre verdadero. Fue entonces que esa familia vino a ver a su salchicha perdida y se reencontraron por primera vez, luego las visitas se repitieron para constatar su recuperación.
Acaso no es cierto que una sueña a veces que la realidad es lo que inventamos para vivir mejor? Y si la miramos de otra forma nos daríamos cuenta que no sabemos nada ni siquiera de nosotros mismos? La disyuntiva nos toca de cerca y en el hombro. O somos unos creyentes o nos creemos que el milagro está a pocos pasos. Y de milagros se trata esta disquisición, que si usted llegó hasta este párrafo y no se aburrió vamos a seguir con la historia de la salchicha Sacha, o mejor digo una historia de esperanzas y milagros, o más bien de la realidad cotidiana que nos rodea pero que a veces no nos damos cuenta lo importante que es.
Me siguen? Sacha demoró en mi casa alrededor de unos tres meses en que se le hicieron sucesivas placas y ultrasonidos para seguir el desenvolvimiento de la soldadura de su cadera y su pata derecha, gracias a muchas personas amantes de los animales y al grupo CEDA ella contó con medicamentos y atención colegiada, tomó todo lo habido y por haber para bajar la inflamación y fortalecer sus huesos, recibió caricias, alimentos y baños en bañadera como parte de su fisioterapia perruna, y ya en esta última quincena empezó a caminar por sí sola como la vida manda.
Y hoy 22 de junio vino Gilberto a buscarla y se la llevó.