Los lagartos constituyen un grupo de animales con características fascinantes. Sus capacidades le han permitido una gran capacidad de adaptación, así como una diversidad amplia de familias, géneros y especies.
Entre los varios animales que pertenecen a este suborden de los saurópsidos, se encuentran las lagartijas, las iguanas, los varanos y los sorprendentes camaleones, entre otros. Una característica que los identifica en común es la piel, son animales con escamas en diferentes tramas, densidades y colores.
Este tipo de piel tiene diferentes cualidades, como la textura, así como también les proporciona varias ventajas. Para conocer en detalles estos datos sobre la piel de los lagartos aquí encontrarás todo lo que necesitas saber.
Funciones de la piel de los lagartos
En todos los animales la piel cumple funciones muy importantes, protege todos los tejidos, huesos y órganos del cuerpo. Actúa como una barrera ante enfermedades, así como del ataque de microorganismos. Además, cumple tareas de permitir algunos intercambios con el medio.En el caso de los lagartos, al ser un grupo tan amplio de diferentes animales, la piel y su cubierta de escamas actúa de distintas maneras. En los geckos es mucho más flexible, delgada y en algunas especies las escamas son grandes, incluso se desprende con mucha facilidad, lo que le ayuda a escapar de depredadores.
La defensa es parte importante de este tejido exterior, ya que, dependiendo del tipo de lagarto, presenta fuertes filamentos como púas y actúa como una manera de disuadir ante un depredador que se anime a intentar cazarlos. Si no es suficiente para evitar un ataque, ayuda a protegerse de las mordidas. Es por ello que se aprecia que, algunos, tienen una larga cresta que va desde la cabeza hasta la cola, cubriendo toda la zona de la espalda.
En general esta cualidad protectora se puede observar más en los machos que en las hembras, lo que representa una manera de dimorfismo. Esta diferencia se relaciona con el hecho de que los machos suelen enzarzarse en combate con otros machos en los periodos de reproducción para conseguir una hembra o todas las posibles. También se dan enfrentamientos por la defensa de los territorios.
No solo contra los depredadores funcionan estas formaciones en la piel, que varían en cantidad, concentración y resistencia; sino que también amortigua los golpes que a menudo puedan sufrir. Por ello su piel es fuerte, aunque a la vez flexible, así se puede ver en especies, como en las iguanas, que parece floja, como si les quedara grande. Es una solución evolutiva para evitar daños a los órganos internos.
Los colores y tonalidades también son otro elemento llamativo de los lagartos. Estos pigmentos aparecen por la actividad de unas células llamadas cromatóforos, que determinan la configuración de los patrones que exhiben.
A diferencia de otros animales que están recuperando la piel gracias al trabajo celular, los lagartos cambian de piel. Este proceso es diferente según el grupo o especie, pero no funciona de manera idéntica que las serpientes, que se deshacen, cada cierto tiempo, de toda la piel como una capa o cubierta muerta, sino que se desprende por partes.
¿De qué están hechas las escamas de los lagartos?
Las formaciones escamosas, por lo común, son duras y pueden estar superpuestas o juntas como placas, que son de distintos tamaños. La parte exterior está constituida de queratina, una proteína que cumple múltiples funciones de protección y formación de estructuras. A diferencia de los cocodrilos y otros animales, los lagartos no generan osteodermos, que es como una coraza de huesos bajo las escamas.¿Cómo se siente al tacto tocar a un lagarto?
Como se ha comentado, son muchos los animales reunidos en esta categoría de los lagartos, son alrededor de unas 5.000 especies. Por esta razón, no hay una sensación uniforme o única para todos en la textura de su piel, aunque comparten algunos rasgos.La piel de los lagartos, con excepción de un grupo que parece permanentemente mojado, no genera humedad. De manera que su piel, aunque se siente seca, no deja de ser flexible y dura a la vez.
La conformación de la piel tiene una epidermis, la capa más exterior de la piel, que es protectora; y también tiene capa interna, llamada dermis, que preserva nutrientes, humedad, etc.
Varios lagartos tienen la facultad de separar la sal en el interior de sus cuerpos. Esta es eliminada a través de la piel, por lo que en ocasiones se puede ver unas acumulaciones blancas en las hendiduras y las escamas, que no es otra cosa que sal. Al hacer esto, logran preservar niveles de humedad para cumplir todas sus funciones, aún si no consumen agua.
En su mayoría la piel se siente áspera y rugosa por las escamas, aunque algunas especies al tenerlas muy juntas y pequeñas parecen casi lisas. También hay especies que dan la sensación de ser granulosas, como diminutas formas redondeadas secas.
Un elemento sorprendente de la complejidad de la piel de los lagartos es la capacidad de perder la cola. En una situación de ataque por un depredador, o por quedar atrapada de alguna manera, se puede liberar de la cola. Esta se va a agitar durante unos segundos, lo que sirve de distracción y le da tiempo para huir. Es una valiosa herramienta evolutiva que se conoce como autonomía: la cola, en poco tiempo, vuelve a crecer.