Aun así, es posible que ellos se vean afectados en algunos momentos por las novedades, nuestras hormonas o nuestro estado de ánimo y sientan también nervios, ansiedad o estrés. Debemos estar atentos a su comportamiento porque muchas veces nos pueden estar indicando mediante pequeños gestos casi inapreciables que están más nerviosos de lo habitual y, si conseguimos detectarlo pronto, actuaremos de forma más rápida y la cosa no irá a más.
¿Qué hemos podido notar nosotros en Lucca, Zelda y Link?
Desde que me quedé embarazada hemos intentado mantener una rutina diaria con los tres que incluya un rato de juegos al día, comida y paseos a la misma hora, etc. Hay que ser conscientes de que cuando llegue el bebe nuestro tiempo se reducirá de manera increíble, por lo que no es tan importante la cantidad si no la constancia: Más vale dedicarles 10 minutos cada día que hacerlo un día durante 1 hora y luego no repetir en una semana.
También hemos intentado que los cambios en casa sean progresivos: Primero retiramos el dormitorio antiguo, esperamos unos días para pintar y unos días más tarde montaron la nueva habitación. Durante todos estos cambios les dejamos que investigasen en todo momento y hemos mantenido su cama de radiador, sus mantas y su rascador en la habitación.
Además, hemos colocado en casa Zenifel para los gatos y, cuando esperábamos visitas, les hemos ayudado con X-Stress de Anibio y Zylkene. Aún así, hemos tenido algunos episodios y pequeños indicios con cada uno de los tres peludos de casa que nos han indicado que los niveles de nerviosismo iban subiendo…
Lucca
Aumento de los ladridos: Cuando Lucca llegó ladraba a todo lo que se movía y ante cualquier ruido en la escalera de casa… Con trabajo y paciencia conseguimos que fuese controlándolo, aunque siempre hay determinada gente o animales a los que sigue ladrando, por lo que aun nos queda trabajo por delante. Desde que me quedé embarazada se ha vuelto más selectiva aun cuando yo paseo sola con ella o estamos solas en casa y es más habitual que ladre.Evita los paseos las dos solas: Desde que llegué al quinto mes de embarazo Lucca decidió que no debíamos pasear las dos solas… Si salimos de casa sin compañía únicamente pasea por las zonas cercanas a casa y al poco rato decide que quiere volver. Sin embargo, si vamos con amigos, mi marido o algún familiar podemos alargar los paseos todo lo que queramos.
Episodios de miedos: Hemos tenido varios episodios en los que Lucca se ha asustado bastante en diferentes situaciones y hemos tenido que ir a casa. Ha coincidido con momentos en los que parece que ha tenido alguna molestia en la espada, pero sin duda las reacciones han sido excesivas posiblemente incrementadas por algo de estrés.
Zelda
Zelda tiene su manera especial de indicarnos que se ha estresado por algo… y es orinar en alguna de sus camas. Durante todos estos meses solamente lo ha hecho en una ocasión, tras el montaje de la nueva habitación.
Lo primero que hicimos (pese a estar seguros de que el problema era el estrés) fue pasar por el veterinario para descartar problemas físicos (algún problema urinario, de su cadera, etc) Siempre, repito SIEMPRE, que nos encontremos ante un cambio de comportamiento de nuestro perro o gato ese debe ser el primer paso: Descartar enfermedad.
Una vez que comprobamos que estaba sana como una manzana, comenzamos la utilización de Zenifel y la verdad es que hemos notado mejoría. De momento no ha vuelto a orinar fuera y, además, lleva mejor la llegada de visitas a casa.
Zelda no es muy amiga de la gente desconocida, aunque si le dan su tiempo y espacio la curiosidad le puede y sale a saludar. Pero de primeras ella siempre cuenta con su lugar seguro en mi vestidor entre mi ropa y yo lo dejo siempre disponible para que pueda aislarse cuando lo necesite.
Ella sigue acudiendo a su sitio seguro cada vez que llega alguien a casa pero, así como estos meses de atrás tardaba horas en salir, desde que utilizamos Zenifel suele acudir a cotillear mucho antes.
Link
Link es de otra pasta y no muestra su estrés de formas tan evidentes pero, posiblemente, esto sea peor si no estamos muy atentos a sus pequeñas señales.
En primer lugar, la muda este año le ha afectado mucho más y cada vez tengo más claro que posiblemente tenga algo que ver el estrés: puede que le haya hecho perder más pelo, acicalarse más o una combinación de ambas.
Por otra parte, ha tenido un par de episodios nocturnos en los que muerde el pie de mi marido a la vez que amasa y patalea. Ha buscado ese sistema como forma de desestresarse y solo lo ha hecho dos veces pero estamos trabajando para evitar que sea necesario dedicando un rato antes de dormir a jugar (ojo, es importante no sobre excitarles) y comenzando de nuevo la toma de Zylkene que a él le funciona siempre muy bien.
Otros pequeños cambios
Como hemos comentado, en la habitación de Bastian hemos dejado uno de los árboles rascadores de Zelda y Link. Desde que realizamos el cambio de la habitación lo han utilizado muchísimo más, ya que ha sido su forma de marcar esa habitación como algo dentro de su territorio.
Si no hubiésemos dejado el rascador, hubiesen utilizado cualquier otra cosa para dejar sus marcas como la mecedora, los muebles, etc. Por lo que ha sido un acierto total.
También he notado que durante la semana que he estado de vacaciones el cambio les afectó a los 3 pese a que más o menos mantuvimos la misma rutina. Espero que en breve, cuando esté de baja, se vayan acostumbrando poco a poco al cambio.
Como veis, no hemos llegado a tener grandes problemas y con cada pequeño síntoma nos hemos ido adaptando a sus necesidades y mejorando rutinas para reducir esos pequeños niveles de estrés. Si dejamos que esto vaya a más podemos encontrarnos con problemas de comportamiento más complejos, por lo que es muy importante la prevención.
Has vivido tu embarazo con tus peludos ¡Cuéntanos tu experiencia en los comentarios!