El Ph de los perros es alcalino mientras que el nuestro es ácido, por eso los perros tienen productos de cosmética distintos que los que nosotros usamos. Hay una forma casera de bañar a un perro con productos que puedes tener en tu casa:
-Moja su manto con agua tibia.
-Impregna con Maicena o talco y frota un poco a contrapelo para que penetre en su piel.
-Tapa con una toalla el cuerpo del perro por unos minutos para que el talco absorba la humedad y la suciedad.
-Seca enérgicamente con la toalla frotando a contrapelo.
-Cuando ya no se vea el talco en su pelo, cepilla con energía a contrapelo con una herramienta específica para su tipo de pelo (cepillo adecuado).
-Da una teminación con un buen cepillado en la dirección del pelo para que el pelaje quede ordenado y presentable.
Este tipo de baño es excelente en épocas de mucho frío. Además con esta técnica lo puedes bañar a diario sin correr el riesgo de perjudicar su piel, pues aunque uses un champú específico para perros, lo mejor es siempre bañarlo 4 veces al mes máximo. Cuando se baña a un perro de forma tradicional, la piel pierde mucha protección contra las temperaturas extremas y las lluvias, por ejemplo.
La desventaja de esta simple técnica casera es que no sirve para dejar impecable a un perro muy sucio, sino que es útil para mantener la limpieza de un manto bien cuidado periódicamente. Puedes bañarlo de esta forma sencilla una vez a la semana y reforzar esto con un cepillado diario.
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