Artículo de Lluís Visa, tomado de El País.com
Aubèrta, la cría de oso que apareció desorientada el pasado 17 de abril en el patio de una casa del núcleo urbano de Aubèrt (Val d"Aran), será liberado el próximo invierno en el sur de Francia antes de que entre en la fase de hibernación.
En una reunión transfronteriza celebrada en la sede del Conselh Generau d"Aran para decidir el futuro de la osezna, la comisión de seguimiento del oso pardo del Pirineo decidió que el animal, que ya tiene ocho meses y pesa 40 kilos, está en condiciones de volver a la vida salvaje. Desde su captura la osita ha vivido en semilibertad en un cercado secreto de valle de Aran.
Los técnicos han analizado los aspectos técnicos del retorno de la osezna al medio natural, como la época y el lugar de la liberación y los sistemas de seguimiento que se usarán para conocer en todo momento sus movimientos. En cuanto al momento de la suelta, ésta tendrá lugar una vez avanzado el invierno y dependerá de la disposición de alimentos y de la climatología.
Las autoridades catalanas pedirán al Ministerio de Medio Ambiente español que ofrezca formalmente a su homólogo francés la posibilidad de soltar la osa en la parte occidental del Pirineo donde solo quedan dos machos. En caso de negativa, la otra opción estudiada es la del Pirineo de Lleida. Los gobiernos de Aragón y Navarra han rechazado liberarla en su territorio.
Ivan Afonso, técnico del Conselh Generau, ha explicado que todos los movimientos del animal serán controlados remotamente mediante identificadores visuales colocados en las orejas, un emisor GPS colado en la espalda y un emisor de radio intraabdominal.
El programa europeo de reintroducción del oso pardo en el Pirineo se inició en 1996 con la suelta de algunos plantígrados procedentes de Eslovenia y en la actualidad se calcula que ya hay una treintena de ejemplares.