Artículo de Ylenia Lorenzo, tomado de La Opinión de Tenerife
Un primate de la Fundación Neotrópico, que acoge animales exóticos incautados.
la opinión
Tenerife será el único lugar del país y uno de los pocos de Europa en aislar a animales exóticos que supongan un riesgo sanitario para los humanos. Expertos ya han alertado en varias ocasiones de la necesidad de luchar mejor contra la introducción clandestina de especies raras por las patologías que pueden traer, como es el caso del ébola, una fiebre hemorrágica que proviene de murciélagos y que ya ha infectado en su último brote a 4.784 personas en África Occidental. Para blindarse ante este tipo de enfermedades contagiosas, la Isla contará con una unidad de cuarentena para que, en caso de que un animal sea portador, funcione como punto de freno evitando así que se extienda entre las personas.
Este proyecto ha sido desarrollado por la Fundación Neotrópico, que lleva desde hace más de 25 años trabajando con este tipo de fauna, y será financiado por el Cabildo de Tenerife. El presidente insular, Carlos Alonso, informó de que la inversión prevista para su construcción será de unos 250.000 euros y ya existe acuerdo entre los implicados para su desarrollo.
La Institución ha adquirido "el compromiso para instalar en la Isla una unidad de cuarentena con el máximo nivel de protección biológico para tratar aquellos animales que puedan estar infectados con alguna enfermedad", un centro pionero en España que será desarrollado en el último trimestre del año y que está previsto que entre en funcionamiento antes de que termine el ejercicio.
El mandatario tinerfeño subrayó que la Corporación ya ha apoyado al Instituto Universitario de Enfermedades Tropicales (IUET) en su labor y destacó que cuenta con "un laboratorio para ese tipo de enfermedades vinculadas al hombre". Con esta nueva unidad orientada a la fauna, "completaríamos esa red de seguridad porque va a permitir mejorar el control de la introducción de los animales". A las medidas de prevención contra las patologías graves contagiosas hay que sumar la designación este mismo año del Puerto de Santa Cruz como zona de actuación.
En el caso del muelle, cualquier pasajero o especie que presente signos de infección podrán arribar a la instalación capitalina para ser atendidos en el hospital, mientras que los que lleguen por aire deberán desviarse a otro aeropuerto que haya sido declarado por el Estado como punto de entrada.
El presidente y coordinador de Investigación de la Fundación Neotrópico, Jaime de Urioste, advirtió ayer de que el riesgo de que llegue cualquier ejemplar portador proviene desde "África, Asia y América", siempre y cuando no haya pasado "los trámites veterinarios", mientras que la Unión Europea "no es emisor de enfermedades emergentes al nivel del que hablamos". Recordó que Canarias se encuentra en un punto céntrico entre estos tres continentes y el problema es que "la gente tiene la manía de traerse animales sin pasar los trámites, y hablamos de que muchas de estas infecciones nuevas y muy alarmantes se están transmitiendo al ser humano bien por mantenerlos como mascotas o bien por consumirlos".
Indicó que patologías como el ébola se daban en áreas adentradas en la selva y, en caso de contagio, "podía moría un poblado completo, pero lo hacía de forma aislada". Ahora, "que cada vez se llega a más zonas profundas de la selva, se está entrando en contacto con enfermedades que hasta ahora eran desconocidas o para las que no se ha conseguido desarrollar una lucha efectiva".
Usando esta fiebre hemorrágica como ejemplo, De Urioste explicó que el animal que la porta es un murciélago egipcio de la fruta, entre otras especies, y que se comercializa a veces "ilegalmente, incluso aquí en Canarias". "Suponemos que los que venden mediante el tráfico clandestino de Europa, pero si vienen directamente de África pueden ser perfectamente portadores de este tipo de enfermedades, al igual que los mapaches y los coatíes", dijo a modo de ejemplo.
El presidente de Neotrópico afirmó que hay "un montón" de animales que tienen sus propias patologías con las que han ido evolucionando a lo largo de miles de años y que se han hecho resistentes a ellas, "y no les afectan pero a nosotros sí, y eso es un problema gravísimo, por eso la importancia de insistir en que la gente lleve a cabo los trámites establecidos para traerlos", insistió el coordinador de Investigación.
Otra de las medidas necesarias es precisamente "establecer una barrera para que, en caso de que se detecte cargamento ilegal de países terceros, se puedan poner en cuarentena para evitar que se extienda por Canarias", y este punto para hacerle frente estará en Tenerife.
El presidente de la organización detalló que a nivel nacional hay dos centros veterinarios que funcionan como laboratorios con nivel de seguridad máxima, pero no son igual a lo que se va a abrir en la Isla. En el caso de los de la Península, en ellos se mantienen cepas de las patologías para estudiarlas, pero en el de aquí no las habrá, sino que será un lugar "donde aislar para que, si aparece algo, tenerlo contenido; es totalmente diferente", resaltó.
De esta forma, en el supuesto de que se registre de forma clandestina la entrada de animales exóticos en la Isla, se llevarán a la unidad de cuarentena, "donde es imposible que se salga de ahí cualquier patógeno". A partir de ahí, se analizaría si suponen un riesgo para la salud de los humanos y, en caso de que así sea, se investigarán los síntomas, de dónde provienen y cuántas personas han estado en contacto con ellos "para evitar que se expanda".
Ante la ausencia de otros centros en el país con estas características, la unidad de la Fundación Neotrópico "sería muy innovadora y de las pocas que hay en "Europa", subrayó De Urioste, quien insistió en que se habla de "contener animales que no han pasado ningún tipo de cuarentena y que vienen de países que potencialmente son peligrosos por la presencia de este tipo de enfermedades". Por tanto, la finalidad de esta instalación frenar la patología, y "después se establecerá cómo se actúa para la gente que ha estado en contacto con el ejemplar". En este punto, será imprescindible el personal experto, como los del IUET.
Anunció que la idea es edificar el centro en el último trimestre del año y que será "relativamente rápido", ya que se trata de una construcción modular, pero aún falta por determinar su ubicación porque hay que seleccionar una zona con las "condiciones de seguridad pertinentes, alejadas de edificaciones habitadas". De Urioste resaltó que esto último no es porque sea un peligro, ya que "hablamos de que es el sistema más seguro que existe en cuanto a contención de patologías", sino porque "no deja de generar alarma ya que la gente oye enfermedad y se asusta".
"Esperamos que desde que se dé el visto bueno a los trámites legales", su puesta en marcha "sea muy rápida, sobre todo porque ahora tenemos el brote de ébola, pero en realidad éste afortunadamente pasará, pero podrá reaparecer a nuestro lado u otro tipo de enfermedades", advirtió. Por tanto, "es importante tener la unidad preparada para estar resguardados", sentenció.
Fuente: este post proviene de Stop al maltrato animal, donde puedes consultar el contenido original.
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